Los datos, dados a conocer este miércoles por el INE y el Ministerio de Economía, reflejan que en Chile hay cerca de 2 millones de personas microemprendedoras y que en promedio obtienen más de 825 mil pesos mensuales con sus negocios.
Biministro García: “esta encuesta muestra un avance importante para las microempresas en Chile porque vemos un aumento en sus ingresos y una disminución en la informalidad. Esto significa mejores salarios, más empleo formal y, en definitiva, mejores condiciones para miles de familias”.
El biministro de Economía, Fomento y Turismo y Energía, Álvaro García, junto al director nacional del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), Ricardo Vicuña, realizaron la presentación de los resultados de la VIII Encuesta de Microemprendimiento (EME) 2025, la que reveló un descenso en la informalidad desde un 58,3% en 2022 a un 54,2% en 2025 y un aumento en el ingreso promedio mensual de las personas con sus negocios desde $658.662 en 2022 a $828.612.
Esta encuesta, realizada entre mayo y agosto de este año, constituye el principal instrumento para caracterizar la heterogénea realidad de los pequeños emprendimientos en el país. En esta versión se indica que hay un total de 1.998.178 personas que son microemprendedoras en Chile, es decir, trabajan por cuenta propia o son empleadoras dueñas de una microempresa con hasta 10 trabajadores.
El biministro García destacó los datos arrojados por la EME 2025, “esta encuesta muestra un avance importante para las microempresas en Chile porque vemos un aumento en sus ingresos y una disminución en la informalidad. Esto significa mejores salarios, más empleo formal y, en definitiva, mejores condiciones para miles de familias. Como persisten brechas relevantes, especialmente en los ingresos entre hombres y mujeres, nos desafía a seguir impulsando políticas que mejoren la participación laboral femenina y promuevan la corresponsabilidad del cuidado. La tarea continúa, pero estas cifras son una señal positiva del camino que estamos recorriendo.”
En tanto, Ricardo Vicuña destacó el esfuerzo de haber levantado este diagnóstico en un año: “La encuesta es un insumo clave para comprender cómo se desarrolla esta actividad en Chile, permitiendo conocer sus ingresos, niveles de formalidad, brechas de género y necesidades de capacitación. Haber levantado y entregado los resultados dentro del mismo año es un hito institucional que fortalece el trabajo conjunto entre el INE y el Ministerio de Economía, y entrega información oportuna y de calidad para diseñar mejores políticas públicas que apoyen a quienes emprenden en nuestro país.”,
Esta versión de la EME dejó en evidencia que un 59,3% de los microemprendedores son hombres y un 40,7% son mujeres, mientras que un 45,9% tiene entre 35 y 54 años y el 21,2% tiene entre 55 y 64 años. En esta línea, el 86,8% del total son cuenta propia, en tanto que el 13,3% son empleadores (trabajador independiente que contrata al menos un empleado asalariado de forma permanente). De quienes son empleadores, un 40,6% tiene solo un trabajador o trabajadora, y un 37,1% cuenta con 3 o más personas que trabajan en su negocio.
Las personas microemprendedoras obtienen, en promedio, $828.612 mensuales con sus negocios. Del total de personas un 20,6% obtuvieron ganancias superiores a $1.000.000, mientras que un 4,2% por sobre $3.000.000. El ingreso mediano llegó a los $400.000.
Formalidad y Motivaciones
Del total de personas microemprendedoras, un 54,2% desarrolla su actividad económica de manera informal, es decir que no está registrado ante el Servicio de Impuestos Internos (SII) y no mantiene un sistema contable que les permita separar los gastos del negocio de los gastos del hogar.
La cifra es menor que en la anterior EME, realizada en 2022, cuando este porcentaje se situó en 58,3%. Se observa que la informalidad en mujeres disminuyó en 4,2 pp. en comparación con la versión anterior, mientras que en hombres la disminución fue de 3,9 pp.
Entre las principales razones declaradas para no formalizarse se manifiestan por las percepciones de que “El negocio es demasiado pequeño y/o la actividad es poco frecuente” (52,5%) o bien que “El registro no es esencial para el funcionamiento del negocio” (20,2%).
En términos del acceso a la seguridad social, el 43,6% de las personas microemprendedoras realiza cotizaciones por concepto de salud, en tanto que solo el 28,4% cotiza en AFP.
De acuerdo con la encuesta, el 49,4% de las personas microemprendedoras inició su negocio por necesidad, mientras que un 34,8% lo hizo por el surgimiento de una oportunidad.
Un 60,4% de las personas microemprendedoras inició su negocio con recursos propios, y solo el 12,2% señaló haber utilizado algún tipo de préstamo o crédito como fuente principal del financiamiento inicial de su negocio.
La mayoría de las personas microemprendedoras (92,0%) realiza actividades de trabajo doméstico o trabajo de cuidados no remunerado. El 95,6% de las mujeres participa más en este tipo de actividades que los hombres (89,0%). Las mujeres microemprendedoras dedican más de 11:08 horas diarias al trabajo global (trabajo en la ocupación más el trabajo no remunerado). Los hombres, 10:43 horas.
La EME se realiza desde 2013 cada dos años. Es la medición oficial usada en el país para caracterizar, de manera profunda, la heterogénea realidad de los pequeños emprendimientos en Chile ya sea formales o informales, pertenecientes a todos los sectores económicos.